En octubre del año pasado, en los alrededores de Puerto Montt, específicamente en Río Mar en la localidad de Chamiza, Carretera Austral, tuvo lugar un asombroso descubrimiento arqueológico que ha aportado valiosa información sobre la historia de las comunidades sureñas de Chile. Durante excavaciones privadas, la Brigada de Homicidios y el Laboratorio de Criminalística de la PDI identificaron vestigios arqueológicos, coordinando con el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural (Serpat) y el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN).
Salvataje de restos arqueológicos en Conchal de Río Mar, Puerto Montt (Fotografía: UACH, Puerto Montt)
Constanza Cortés, la responsable de Arqueología de la Universidad Austral (UACh), señaló que se encontraron conchas y restos óseos asociados al perfil, indicando la presencia de un conchal de características monticulares. Este descubrimiento, catalogado como de contexto prehispánico, insinúa la existencia de un conchal y osamenta con miles de años de antigüedad, vinculándose a la cultura ancestral del Pueblo Chono, un conjunto de cazadores-pescadores-recolectores que ha dejado testimonios de su existencia a lo largo de más de 6,000 años en la costa sur de Chile, incluyendo los alrededores de Puerto Montt, el archipiélago de Chiloé y los canales de Aysén.
El Pueblo Chono, genéricamente designado para los grupos que forman parte de esta cultura ancestral, es considerado nómade canoero y su territorio se extiende desde los 43° hasta los 48° de latitud sur, abarcando los archipiélagos de Chiloé, el archipiélago de los chonos (Aysén), hasta la Península de Taitao y el Golfo de Pena, con antecedentes que datan entre 12 mil a 15 mil años, incluyendo evidencia en los alrededores de Puerto Montt.
A pesar de la importancia histórica y cultural de los Chonos, han enfrentado desafíos considerables a lo largo de la historia, como masacres genocidas, enfermedades foráneas y acciones de asimilación, exclusión y negación por parte de la corona española y posteriormente por el estado chileno. Aunque existe una cantidad relevante de descendencia en la actualidad, principalmente en las islas del archipiélago de Chiloé, el Estado chileno aún no ha reconocido oficialmente su existencia mediante la ley, ni se han establecido políticas orientadas a la recuperación de aspectos fundamentales de su vida, cultura y lengua. Se estima que en la actualidad, el idioma de este pueblo podría estar extinto.
El salvamento de los restos arqueológicos fue llevado a cabo por la Escuela de Arqueología de la UACh en colaboración con diversas instituciones, evitando el deterioro de los huesos durante el proceso. Posteriormente, los restos fueron trasladados al Laboratorio de Conservación de la Patagonia UACh, donde el antropólogo físico Arturo Sáez anticipa que los estudios futuros proporcionarán más detalles sobre la vida y características de este individuo prehispánico, contribuyendo así tanto a la historia arqueológica como a la rica herencia cultural de los Chonos.
Hallazgo arqueológico (Foto: CMN)
Este lugar no es solamente un sitio funerario, pues se registra un conchal que es resultado de las actividades de un campamento habitacional. Entonces, lo que hay son desechos domésticos, como conchas de los mariscos que la gente consumía, restos de peces y de mamíferos. Estos aparecen tanto encima como bajo el contexto funerario y también mezclados en la tierra que lo estaba cubriendo. Además de eso, se encontraron un restos de cerámica, fragmentos de artefactos líticos (instrumentos de piedra) y un instrumento hecho en hueso de mamífero marino, una especie de espátula.
Este descubrimiento arroja nueva luz sobre la complejidad y riqueza de la vida cotidiana de los antiguos habitantes de esta región.