Explorando la Importancia Ecológica del Santuario de la Naturaleza Humedales del Río Maullín
En el mes del patrimonio en Chile, es crucial dirigir nuestra atención hacia los tesoros naturales que definen nuestra identidad como nación. En este contexto, el Santuario de la Naturaleza Humedales del Río Maullín emerge como un punto de referencia esencial, no solo en términos de biodiversidad, sino también como un testimonio de la intrincada red de vida que sustenta nuestro ecosistema.
©José Cardenas
El río Maullín se presenta como un corredor hídrico vital, con una longitud de 85 kilómetros que se extiende desde el Lago Llanquihue hasta desembocar en el Océano Pacífico. Su desembocadura, formando uno de los estuarios más extensos de la región, alberga una biodiversidad excepcional, incluyendo una rica variedad de aves, peces y moluscos.
El santuario abarca una extensión de 8.152 hectáreas, protegiendo no solo al río Maullín en sí, sino también a cinco humedales esenciales: Quenuir, Las Lajas, Lepihué, Amortajado y Lenqui. Estos humedales, con su variedad de ambientes que incluyen praderas inundables, estuarios y lagunas, actúan como verdaderos santuarios para una multitud de especies. Su inclusión en la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras (RHRAP) destaca su importancia como áreas de descanso y alimentación para aves migratorias que viajan desde el Hemisferio Norte y Austral.
Flamencos ©José Cardenas
Entre los tesoros naturales que residen en este santuario, el bosque pantanoso o hualve se alza como una joya única de Chile. Originalmente extendido desde Coquimbo hasta la Isla Grande de Chiloé, estos bosques ahora se encuentran en fragmentos dispersos, representando uno de los ecosistemas más amenazados del país. Los hualves, hogar de una diversidad de flora y fauna, desempeñan un papel crucial en la purificación del agua, la mitigación del cambio climático y la protección de la biodiversidad.
©José Cardenas
La conservación del Santuario de la Naturaleza Humedales del Río Maullín requiere un esfuerzo colectivo. Esto implica no solo el establecimiento de regulaciones para la preservación del área, sino también la implementación de prácticas sostenibles y la educación ambiental para las generaciones presentes y futuras. Es nuestra responsabilidad proteger y preservar este patrimonio natural para garantizar su existencia para las generaciones venideras.
©José Cardenas
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*Conector de Ecosistemas: El Santuario sirve como un puente natural entre los ecosistemas lacustres andinos del Lago Llanquihue y el ecosistema costero del Océano Pacífico, permitiendo el intercambio de especies y nutrientes entre estos dos ambientes tan distintos. *Refugio de Aves Migratorias: Cada año, el Santuario acoge a una variedad de aves migratorias que viajan miles de kilómetros desde el Hemisferio Norte y Austral. Estas aves encuentran en los humedales del río Maullín un lugar de descanso y alimentación vital para su supervivencia durante sus largos viajes migratorios
*Hogar del Huillín: El río Maullín y sus humedales son el hábitat ideal para el huillín o nutria de río (Lontra provocax), una especie en peligro de extinción. Estas adorables criaturas acuáticas encuentran refugio y alimento en las aguas tranquilas y los bosques ribereños del Santuario.
*Conversión en Santuario: Antes de ser declarado Santuario de la Naturaleza en 2019, cinco de los humedales que forman parte de este ecosistema fueron incluidos en la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras en 2016, reconociendo su importancia como áreas clave para la conservación de aves migratorias. La elevación de su estatus a Santuario marcó un hito importante en la protección y preservación de este preciado tesoro natural.
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En este mes del patrimonio en Chile, el Santuario de la Naturaleza Humedales del Río Maullín nos invita a reflexionar sobre la importancia de conservar y proteger nuestros tesoros naturales. Más que simplemente un ecosistema, es un testimonio vivo de la belleza y la diversidad de la naturaleza chilena, y una llamada a la acción para asegurar su preservación para las generaciones venideras.
